jueves, 31 de enero de 2008

Al ritmo de Róisín Murphy







Irlandesa de nacimiento, inglesa de adopción, Róisín Murphy se ha convertido en los últimos años, y por méritos propios, en la gran reina del ritmo.

Los magníficos inicios de esta cantante se remontan a 1995, formando parte del grupo Moloko, formación de pop alternativo y música electrónica (ritmo puro), que consiguió algunos éxitos , como "Fun for me", "Never enough" o el magnifico "Sing it back", sobre todo en su forma de remix (Boris Musical Mix).
Cuatro discos (1995 - 2003) fueron el legado de Róisín Murphy al frente de Moloko para después iniciar su carrera en solitario.


Su primer disco en solitario, Ruby Blue (2005), retomaba los sonidos de los primeros discos de Moloko; pop electrónico y sonidos extraños, sin olvidar elementos más comerciales y temas "preparados" para ser éxitos (Sow into you)

Portada del disco Ruby Blue



Ruby Blue es un disco dificil de escuchar y de apreciar, sobre todo si tenemos en cuenta lo mal acostumbrados que Moloko nos tenia con sus últimos discos, los cuales eran mas asequibles y alegres. Con todo esto no quiero decir que Ruby Blue no sea un disco recomendable para todos los públicos, pero hay que ser algo mas receptivo que en otras ocasiones.


El pasado año se publicó su segundo disco, Overpowered. El single elegido para preceder al lanzamiento del disco fue el tema que da nombre al disco, y que pronto se convirtió en éxito comercial y material codiciado para los remixers (mención especial para el Seamus Haji Remix). Esto es una prueba mas del nuevo giro de Róisín Murphy este nuevo trabajo. Un disco con un ritmo y un tempo mucho más cercano. Todos y cada uno de sus temas incitan a bailar, moverse o a seguir su ritmo. Pero no todo podía ser estándar en un disco de la ex de Moloko; sonidos europeos y norteamericanos se entrelazan en este disco.


Portada del disco Overpowered


Overpowered es un disco magnífico y optimista. La nueva y seria candidatura que presenta la atractiva Róisín Murphy para llegar a ser ,otra vez, la reina del ritmo.




miércoles, 16 de enero de 2008

Chan-wook Park y la trilogía de la venganza (y II )









La segunda película es, ni mas ni menos, Oldboy (2003). Un bocado agridulce con una impecable puesta en escena rematada con una magnificas interpretaciones. Mención especial merece también su banda sonora; jamás "La primavera" de Vivaldi había conseguido que apartásemos la mirada de la pantalla.

Basado en un manga de origen japones, Oldboy comienza con el secuestro sin aparente razón de Dae-su Oh. Las razones del secuestro no se revelarán durante su largo, muy largo, cautiverio. Años de soledad y de remordimiento por lo desconocido le guiaran inexorablemente por el camino a la locura hasta ser un monstruo cautivo.

Un día, sin previo aviso, es liberado. La venganza, en esta ocasión, a dos bandas, comienza como un juego para unos y como una necesidad vital para otros.

No apta para espectadores sensibles, Olboy es sin duda, una película que hace sufrir tan solo con imaginarnos el sufrimiento de los protagonistas. Un placer en forma de celuloide.




El capitulo final de esta particular trilogía es Sympathy for Lady Vengeance (2005). En esta ocasión la protagonista de la cinta es una mujer, que tras pasar mas de 13 años en prisión por el asesinato de un niño intenta rehacer su vida sin perder de vista la venganza hacia el autentico asesino del niño. El tiempo que ha pasado en prisión y las razones que la llevaron a su injusto encarcelamiento han transformado a Yeong-ae Lee de una dulce mujer a un ser frió y calculador, vengativo y cruel.
La estética que Park plasma en la película es una de los elementos mas apreciables, junto con, de nuevo, la indentificacion y, en cierto modo, comprensión, que acabamos sintiendo hacia la protagonista. Su odio es casi el nuestro, y su venganza nuestro sentimiento.
Otra gran película, aun si cabe con mas profundidad y detalles que en los trabajos anteriores de este director.
Una muestra del cariño con el se trata a esta película está en el montaje original, donde la imagen va cambiando progresiva y lentamente de color al blanco y negro. Una sutil pero comprensible forma de acompañar a nuestra vengadora en su fatal camino del color al negro.



Chan-wook Park, el rey de la venganza cinematográfica. Si aún no lo habéis descubierto no dudéis en acercaros a su filmografía. Afortunadamente algunas de sus películas se han estrenado en nuestro país y se han editado en dvd, en mejor o peores condiciones.